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Rutina de sueño para niños

Rutina sueño niños enfermera escolar
Rutina sueño niños enfermera escolar

Para asegurar un buen inicio de curso y llegar más descansados es importante iniciar la rutina unos días antes. Progresivamente y con cierta estrategia, la vuelta al horario de colegio se hará más llevadera.

Retomando hábitos.

A una semana del inicio oficial de las clases, los últimos días se convierten en días de preparativos para la vuelta al colegio: revisar uniformes, comprar material, forrar libros, preparar mochilas… también nuestras enfermeras escolares están poniendo a punto todo lo necesario para comenzar el curso.

Han transcurrido más de 70 días de vacaciones para nuestros niños en los que el ritmo puede haber cambiado respecto al del curso, y retomar hábitos lleva un tiempo. Ahora es el momento de introducir de nuevo algunas rutinas y así evitar que el primer día de colegio sea más complicado, especialmente para los más pequeños.

El sueño los niños.

El sueño es uno de los hábitos que más varía en vacaciones: los días son más largos, con más horas de luz, no hay las mismas obligaciones horarias…

El descanso de los niños (y de los padres) es fundamental para el bienestar de toda la familia, y para ello hay que asegurar la calidad y la cantidad de horas de sueño. Dormir lo suficiente es clave en el crecimiento y desarrollo de los niños, favorece la memoria y la atención durante la jornada.

El descanso es un elemento clave en la salud de la Comunidad Escolar por eso como Servicio de Salud Escolar, desde Seres Salud queremos compartir estos consejos e indicaciones.

Las necesidades de sueño nocturno de los niños varían en función de la edad y la salud, y van disminuyendo según se van haciendo mayores. En la edad escolar estas necesidades comprenden entre las 10-12 horas diarias (niños entre 3-5 años) hasta 8-10 horas (adolescentes).

Consejos para retomar la rutina y horarios de sueño.

Evita el uso de pantallas una hora antes de dormir.

La luz de las pantallas de la televisión, teléfonos o tabletas dificulta la segregación de la melatonina (hormona del sueño), mantiene el cerebro más activo y dificulta el sueño.

Limita la actividad física intensa justo antes de dormir.

Realizar ejercicio durante el día ayuda a relajarse, pero nunca de forma intensa justo antes de la hora del sueño ya que el niño estará demasiado excitado.

Establece una rutina nocturna.

Retoma la rutina del curso anterior, y si no se había llegado a establecer satisfactoriamente; implanta una que ayude al niño a identificar el momento del sueño como algo positivo: Baño o ducha, leer un cuento corto antes de dormir, una canción, o dedicar unos minutos para hablar sobre el día.

Cuida los hábitos de alimentación.

Ofrécele una cena ligera pero nutritiva, pero no justo antes de ir a dormir. Una cena muy pesada dificultará su digestión y le costará más conciliar el sueño.
Ojo con los alimentos muy azucarados: proporcionan un gran aporte de energía y pueden tener efecto excitante.

Orden en la habitación.

Dormir en una habitación bien ventilada, con oscuridad, no demasiado sobrecargada, y sin dispositivos electrónicos disponibles ayudará a conciliar mejor el sueño.

Una semana antes empezar a adaptar los horarios de sueño de forma progresiva.

Si cada día adelantamos la hora de sueño 10 minutos y adelantamos la de levantarle, el día previo al inicio del colegio facilitaremos que se duerma mejor y le cueste menos levantarse.

A pesar de todos estos consejos, los nervios de la noche anterior son normales a la hora de dormir. Volver a ver a los amigos, nueva aula, profesores nuevos… por ello es importante transmitirles seguridad y tranquilidad, hablar con ellos y favorecer todo lo posible la vuelta a la calma para afrontar descansados y contentos la vuelta al colegio